De cara a la próxima gruesa, el agro argentino estaría recibiendo un alivio con las recientes actualizaciones climáticas: la “Niña” proyectada para el ciclo 2024/25 se está atemperando, pasando de una intensidad “muy fuerte” a una “fuerte/moderada”. Así lo revela un último informe de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).
Dos meses atrás, la situación parecía crítica. Las proyecciones indicaban un nivel de enfriamiento en el Pacífico ecuatorial pocas veces visto en los últimos 25 años, con una anomalía de temperatura superficial de -2,34°C prevista para noviembre. Este valor, significativamente bajo, presagiaba una “Niña” muy fuerte, comparable solo con eventos extremos como los de finales de 2007 y principios de 2008, así como los de finales de 1999 y principios de 2000.
Sin embargo, el último informe de la BCR, basado en modelos dinámicos actualizados de organismos como NOAA, NCEP, CPC e IRI, muestra una disminución considerable en las proyecciones de enfriamiento. Las anomalías de temperatura previstas para diciembre y enero ahora se sitúan en -1,5°C, lo que sugiere una “Niña” de intensidad fuerte/moderada en lugar de muy fuerte.
Cristian Russo, jefe de la Guía Estratégica para el Agro de la BCR, destaca la importancia de estas nuevas proyecciones. La disminución del enfriamiento significa que las lluvias y la humedad estarán más cerca de las medias estadísticas, alejando el temor de un desastre agrícola similar al que se temía. Esta tendencia positiva, sumada a la reciente noticia de que el índice del Dipolo Índico estará en fase neutral entre septiembre y octubre, “anulando su acople con la Niña entre octubre y noviembre”, fortalece las perspectivas de un clima más benigno para la agricultura.
Por su parte, el consultor Elorriaga señala que las condiciones decrecientes de “El Niño” en el Pacífico ecuatorial centro-oriental y la persistencia de indicadores neutrales son señales alentadoras. Los modelos pronostican un ENSO neutral entre mayo y julio de 2024, extendiéndose hasta agosto. A partir de septiembre, la “Niña” se convierte en la categoría más probable, pero con una intensidad moderada.