El desarrollo de las finanzas sostenibles ha dado lugar a nuevos instrumentos financieros que permiten a las empresas obtener financiamiento para llevar adelante proyectos de alto impacto, y de esta forma, a alcanzar alguno o varios de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas en materia de combate de la pobreza, educación inclusiva, igualdad de género, empleo digno y crecimiento económico, inclusivo y sostenible.
Por esto es que consideramos muy importante desde la BCR difundir y sensibilizar sobre los Bonos Sociales, Verdes y Sostenibles (SVS); Bonos Vinculados a la Sostenibilidad y Fondos Comunes de Inversión Ambiental, Social y de Gobernanza (ASG) y, de esta manera, promover y profundizar las herramientas que incentiven el crecimiento de emisores e, indirectamente, inversores con enfoque en lo social y/o ambiental, contribuyendo al desarrollo de un mercado de capitales sostenible.
Estos temas se han abordado y conceptualizado en la nota del 25 de febrero de 2022 del informativo semanal.
Desde ese momento las emisiones han venido creciendo en forma sostenida en cantidad de emisiones y en la diversidad de emisores.
En cuanto a los Bonos verdes: definidos como cualquier tipo de valor negociable en el que los fondos se aplicarán exclusivamente para financiar o refinanciar, en parte o en su totalidad, Proyectos Verdes elegibles, ya sean nuevos y/o existentes.
En cuanto a los Bonos sociales, definidos como cualquier tipo de bono en el que los fondos se aplicarán exclusivamente para financiar o refinanciar, en parte o en su totalidad, Proyectos Sociales elegibles.
En este caso los emisores deben identificar claramente el proyecto social y las poblaciones para las cuales se obtendrán resultados socioeconómicos positivos estimados, así como también el impacto social esperado, y resulta particularmente relevante la integración de la perspectiva de género en el diseño del proyecto a financiar.
Con este tipo de bonos, desde febrero del 2022 a marzo del 2023 se han emitido 5 nuevos bonos para financiar temas tales como construcción de nuevas Redes de Acceso de internet y/o su readecuación y como es el caso de la reciente emisión PRO MUJER serie I, que otorga créditos en forma directa a 1.700 personas de las cuales el 86% son mujeres de bajos recursos propietarias de micro y pequeñas empresas, que realizan o trabajan en actividades económicas productivas, de servicios, de comercio, textiles o agropecuarias, en el ámbito de la economía semi formal, que necesitan financiamiento para el capital de inversión u operaciones de sus micro emprendimientos o para sus familias, y no lo consiguen del modo adecuado y/u oportuno de la banca convencional.
En el caso de los Bonos sustentables que financian una combinación de proyectos verdes y sociales, podemos detectar que se utilizó un monto de $ 180 millones para ser aplicado a las siguientes problemáticas: a) poblaciones excluidas y/o marginadas, b) aquellas con insuficiencia o inexistencia de acceso a servicios y bienes esenciales, tales como financiamiento y servicios financieros, c) grupos vulnerables, especialmente con origen en adultos mayores o jóvenes, d) desempleados y e) mujeres y/o minorías sexuales y de género.
A partir de junio 2022 BYMA crea un nuevo panel de Bonos Vinculados a la Sostenibilidad que son cualquier tipo de bono cuyas características financieras y / o estructurales puedan variar dependiendo de si el emisor alcanza, o no, ciertos objetivos predefinidos de Sostenibilidad. En ese sentido, los emisores se comprometen explícitamente (incluso en la documentación del bono) a futuras mejoras en su desempeño en sostenibilidad dentro de un plazo predefinido. Son, por tanto, instrumentos basados en el desempeño futuro previsto.
Desde la creación de este panel, se emitieron 3 proyectos por un total de U$D 72 millones que se utilizan principalmente para formulación de herbicidas Elite en base a la aplicación de nanotecnología que reduce el coeficiente de impacto ambiental, y su objetivo es lograr un crecimiento del 35% en la cantidad de litros vendidos de herbicidas nano (línea Elite). Otro de los proyectos quiere aumentar la participación de energía renovable en el consumo de energía del Complejo Industrial Famaillá, provincia de Tucumán, cuyo objetivo alcanzar un mínimo del 70% de energía renovable en el suministro de energía eléctrica en los 12 meses desde el 30 de noviembre de 2022 al 30 de noviembre de 2023.
En el mes de abril del año 2021, la CNV, mediante Resolución General N° 885, aprobó un régimen especial para los Productos de Inversión Colectiva ASG y Sustentables, cuyo objeto especial lo constituyan Valores Negociables con impacto ambiental, social y/o de gobernanza.
Esto impulso a los inversores a adquirir cuotas partes en Fondos Comunes de Inversión que aplican estrategias de inversión socialmente responsable, que se definen como instituciones de inversión colectiva que eligen los activos que conforman sus carteras en función de criterios ambientales, sociales y de gobierno corporativo. Los elementos que configuran un fondo “responsable” son los mismos que estructuran un fondo de inversión normal, pero se le añaden elementos no financieros a su gestión. Desde esta perspectiva, al día de hoy existen 6 Fondos comunes de inversión ASG que invierten alrededor de $1.925 millones.
Cada vez existen más pruebas de que un enfoque basado en los factores ASG, que van desde la eficiencia del carbono hasta la calidad de la gobernanza, puede ayudar a los inversores a construir carteras más resilientes, con menores riesgos y mayores rentabilidades.
Todos los productos descriptos en la presente nota son relativamente nuevos en el mercado de capitales argentino. Desde la BCR estamos en el camino de la construcción, sensibilización, capacitación y vinculación entre actores, con el propósito de entrenar la mirada, a fin de que todas las inversiones sean en el ámbito de las finanzas sostenibles, como las únicas finanzas posibles.