Un reciente reporte de la Bolsa de Comercio de Rosario revela un panorama favorable para el sorgo en la campaña 2024/25, impulsado por el impacto negativo de la chicharrita en el maíz. La chicharrita, vector del Spiroplasma, ha generado una reducción significativa en los rendimientos del maíz tardío, y se espera que sus efectos continúen afectando la producción el próximo año.
La incertidumbre sobre las intenciones de siembra de la próxima campaña sugiere que el maíz tardío será el más perjudicado, lo que podría inclinar la balanza a favor de la soja y el sorgo. Según estimaciones preliminares, el área sembrada con sorgo podría aumentar, situándose entre 0,9 y 1,2 millones de hectáreas. De alcanzar la cota superior, se registrarían los niveles más altos desde el año comercial 2011/12.
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En un escenario optimista, con 1,2 millones de hectáreas sembradas, la producción de sorgo podría alcanzar 3,8 millones de toneladas. Con un área más factible de 0,95 millones de hectáreas, la cosecha rondaría los 3 millones de toneladas, superando los 2,4 millones de toneladas del ciclo actual. A largo plazo, si se potenciara la cadena de valor, un área sembrada de 2 millones de hectáreas podría llevar la producción hasta aproximadamente 6,37 millones de toneladas.
La creciente demanda de semillas, impulsada por la mayor intención de siembra, ha generado tensiones en el mercado debido a la escasez relativa de insumos. A pesar de esto, la industria está preparada para abastecer un área de 0,95 millones de hectáreas, aunque se anticipa que satisfacer el creciente interés local será un desafío.
En cuanto a las cotizaciones del grano, el mercado doméstico del sorgo muestra volatilidad, con precios actualmente en USD 153/t. A pesar de estar alejados de los máximos de un año atrás, el poder de compra del sorgo sigue siendo superior al observado antes de 2020. La relación de precios entre sorgo y maíz favorece al sorgo debido al encarecimiento del maíz por la chicharrita.
Los márgenes de producción para la campaña 2024/25 son ajustados y levemente negativos para el maíz y el sorgo en campos alquilados. Sin embargo, el sorgo presenta un costo de producción más bajo y una mayor resiliencia al estrés hídrico, lo que lo convierte en una opción atractiva en escenarios de sequía.
A nivel mundial, la producción de sorgo 2023/24 ha aumentado con un consumo estable y un crecimiento significativo en las exportaciones, especialmente hacia China. No obstante, los stocks finales son los más bajos desde 1995, con una relación stock/uso muy ajustada. Para la campaña 2024/25, se proyecta una mayor producción, consumo y comercio, con una recuperación parcial de los stocks finales.
En el ámbito geopolítico, las tensiones entre Estados Unidos y China podrían influir en la dinámica comercial del sorgo. Si bien Estados Unidos ha aumentado las tarifas a productos chinos y China aún no ha realizado compras significativas de sorgo para 2024/25, Argentina podría beneficiarse si China busca otros proveedores debido a un incremento en su demanda de sorgo.