Un giro inesperado en las condiciones climáticas ha desencadenado una semana de sorprendentes contrastes térmicos en la región núcleo. Hace apenas una semana, las temperaturas mínimas eran suaves y primaverales, oscilando entre los 10 y 16 °C. Sin embargo, la llegada de un frente frío acompañado de cielos despejados ha provocado un descenso térmico de más de 15 °C con respecto a la semana pasada. La consecuencia: casi toda la región amaneció bajo la escarcha de heladas agronómicas.
El sector más afectado se encontró en el sur y oeste de GEA, donde se experimentaron temperaturas de hasta -2°C en Junín y Chacabuco (Buenos Aires), -0.9°C en Lincoln (Buenos Aires) y -0.7°C en Canals (Córdoba).
En un giro inesperado, el sur bonaerense, que se temía sería afectado por las heladas, se libró de ellas. La presencia de mayor humedad y nubosidad en las capas bajas de la atmósfera ha funcionado como un amortiguador contra el frío extremo, manteniendo los termómetros en un rango entre 0°C y 5°C. Sin embargo, el hielo no tuvo piedad en San Luis, La Pampa y en el centro y sur de Córdoba.
La gran pregunta que surge es qué nos depara el clima en los días venideros. Según los pronósticos, la región núcleo puede esperar mañanas gélidas y tardes templadas hasta el viernes, cuando se anticipa que las temperaturas adopten un carácter verdaderamente invernal. Los habitantes de la zona deberán estar preparados para enfrentar las bajas temperaturas que se avecinan.